viernes, 28 de septiembre de 2012

C'est fini!

Ahora que mis momentos de no-hacer-nada se han incrementado un poquitín, le han dado tiempo y lugar para repararle las alas a mi mente y que se ponga a volar. En mis madrugadas-mañanas-tardes-noches de meditación, consideré que no era necesario juntar unos minutos para dar por terminado algo. Pero, considerando que mi manera peculiar de cerrar algo es escribiéndo un poco, creo que es sano ordenar todo y ya, let it go.
Llega un momento en que las preguntas empiezan a responderse por sí solas y cada mañana que te ves en el espejo, descubres que estás bien, para luego darte cuenta que estas de puta madre. Estás siendo nuevamente feliz. Al comienzo, no te la crees, pero con el pasar de los días, descubres que tu estado normal is back.
Te das cuenta que todo sigue un proceso. Ya pasaste lo más duro y también lo más penoso. De pronto, son cositas lejanas de las que es bueno despedirse.
Estás lista para cerrar el tomo número (llénese con el tomo que a usted le corresponda) de tu vida y es tiempo de abrir otro.
En las últimas hojas, sé que este tomo tiene un final feliz, le voy a poner uno así, porque estoy sonriendo de nuevo y eso, para mí, es lo más importante.
Dejé de idealizar, de sentir. Pisar tierra fue difícil, pero ya lo hice.
Puedo decir, sin ninguna intención escondida de dama despechada que ya olvidé, ya perdoné y me he vuelto a querer.
No sentir nada no está mal. Es saludable para mí.
It`s gone.
And I'm so happy, now.
Para terminar, creo que es bueno que en la última página esté la canción que resume la historia y bueno, cierro este tomo con la sensación de sentirme nuevamente yo en mis cabales.



No hay comentarios:

Publicar un comentario